La gente asume que todavía te quiero
por tu nombre y esa bendita costumbre
de seguir tus pasos donde no hay camino.
En mi mente sigues tú recordándonos:
Trazas a ciegas las calles de Morelia,
y con dedos blandos lías un nuevo lienzo,
calcas las fibras de mi piel en tus yemas
yo existo en ese tembloroso sendero
y alcanzo a prenderte de mi pozo en llamas.
Como muertos en la escena del crimen;
admitamos que mi rostro, el tuyo, y también
los garabatos del recuerdo eran ciertos.
A pesar de la orfandad entre los gremios
dicen las habladurías que sí te quiero,
vivo o muerto dibujo en el pavimento.
Pero tus pasos ya no son tú, son signos
crueles, indicios de perpetua partida
y la ciudad en constante movimiento.
Beatriz Osornio Morales, imagen de la red. Magritte, El espejo falso.
2 respuestas a «La Partida (Tercias)»
Con el paso del tiempo todo se transforma en signos o símbolos. No podemos escapar de eso.
Un abrazo.
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Incluso quizá sea esa una de las formas más eficaces de recordar más prolongadamente, la memoria nos traiciona tarde o temprano.
Saludos y gracias por comentar.
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